maxon Story

Caminando con una sonrisa en la cara

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Los ojos de la pequeña Luz se iluminan cuando camina por primera vez en su vida gracias a Trexo, un robot para caminar desarrollado especialmente para niños por la empresa canadiense Trexo Robotics. Este es el resultado del trabajo de sus fundadores Manmeet Maggu (CEO) y Rahul Udasi (CTO), movidos por su pasión por Iron Man y su propia historia personal.

La trayectoria de Trexo comienza en 2011, cuando Manmeet recibió la noticia de que su sobrino Praneit padecía parálisis cerebral. Esta enfermedad es un trastorno neurológico causado por una lesión cerebral que se produce durante o inmediatamente después de nacer. Solo en Norteamérica, 500 mil niños padecen esta enfermedad. El diagnóstico de Praneit significó que nunca podría caminar. Manmeet Maggu, el ingeniero de Young robotics, no podía dejar de pensar en ello. Buscó soluciones para ayudar a su sobrino a caminar, pero por desgracia no encontró nada en el mercado. Había disponibles «exoesqueletos», pero estaban diseñados solo para adultos. Así que decidió diseñar su propio robot para caminar y comenzó a trabajar con los niños afectados, los padres y los fisioterapeutas.


Manmeet Maggu fundó Trexo Robotics con su compañero Rahul Udasi, que estudió robótica con él en la Universidad de Waterloo. «Nuestro objetivo es crear tecnologías que se ganen la confianza de los fisioterapeutas, que sean asequibles para los padres y que los niños adoren», explica Manmeet. Después de muchos meses de desarrollo, interminables pruebas y noches sin dormir, Praneit consiguió finalmente su propio robot para caminar. «El momento de mayor satisfacción de mi vida fue cuando vi a mi sobrino dar sus primeros pasos con Trexo».

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Trexo cofounders Manmeet Maggu and Rahul Udasi
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Trexo cofounders Manmeet Maggu and Rahul Udasi

Praneit con su robot para caminar Trexo.

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Los niños con movilidad restringida pasan mucho tiempo sentados, lo que, a lo largo de una vida, da lugar a problemas de salud. El movimiento activo es muy importante. Las piernas del robot Trexo mueven cuidadosamente las piernas del niño. La velocidad y el nivel de asistencia pueden adaptarse individualmente a las necesidades del usuario. También es posible configurar el ángulo de la rodilla y de la cadera.


El robot para caminar Trexo funciona con baterías y se controla mediante una tableta, al igual que los ajustes, como el patrón y la velocidad de marcha. Cada articulacion de la rodilla y la cadera en las piernas robóticas de Trexo ha sido diseñada para moverse dentro del rango de movimiento natural humano. De esta forma, Trexo fortalece las piernas del niño, aumenta la resistencia y mejora notablemente la motricidad. Y lo mejor de todo: Trexo crece con el niño.

Motores potentes para piernas fuertes


Los movimientos precisos y uniformes requieren el apoyo de sistemas motores potentes. Según los fundadores de Trexo Robotics, los robots para caminar tienen un rango de requisitos muy dinámico. En consecuencia, usan dos actuadores en las articulaciones de la cadera y otros dos en las de las rodillas. Los motores y reductores utilizados deben cumplir los requisitos de velocidad y par elevados, así como ser capaces de reaccionar rápidamente a los cambios de par. El espacio y el peso son fundamentales en las articulaciones robóticas, por lo que era muy importante encontrar un sistema motor compacto.

«Como madre, tienes que oír hablar de todo aquello que tu hija nunca será capaz de hacer. Trexo ha cambiado esto».

Los motores planos sin escobillas de maxon cumplen todos estos criterios. Las piernas robóticas usan un total de cuatro motores EC 45 flat de maxon (70 W), en combinación con el reductor planetario GP 42 C (de cerámica) con encoder MILE. Manmeet afirma: «Nos dimos cuenta de que los motores EC Flat de maxon eran los mejores por su tamaño y densidad de potencia. Los reductores planetarios con engranajes de cerámica también ofrecen un par excelente y soportan los cambios de par de salida».


Ya hay unos 100 niños en todo el mundo usando los robots para caminar Trexo. Con cada niño que utiliza el Trexo, el robot para caminar continúa mejorándose. Esto es posible, principalmente, gracias a la estrecha colaboración con los padres. Caro, la madre de Luz, dice: «Trexo nos ha dado mucha esperanza. Como madre, tienes que oír hablar de todo aquello que tu hija nunca será capaz de hacer. Trexo ha cambiado esto».

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Luz con su Trexo.

Para los dos especialistas en robótica es increíble ver a los niños sonriendo mientras caminan y se hacen cada vez más fuertes. Manmeet afirma: «La alegría que vemos en los ojos de los niños y los padres, y el feedback positivo que recibimos, nos motiva aún más para seguir trabajando y mejorando nuestro robot. Para nosotros, cada uno de estos niños es un pequeño Iron Man».

Autor: Anja Wieder

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